La película no está mal. Entretienen las actuaciones de ambos protagonistas, la trama te mantiene dudando de los supuestos misterios y obtienes dosis de acción. Sin que sepamos lo que sucede. Todo empieza con una emocionante captura por parte de nuestro dúo dinámico para detener al asesino Lord Blackwood (Mark Strong). Cuando es sentenciado a muerte y misteriosamente regresa a la vida es que Holmes se siente motivado para continuar con la cacería de este sobrenatural villano, el problema es cuando se convierte en House: La película.
El glamour de este Holmes no se acerca ni a la gorrita famosa del husmeador inglés, sea en la literatura o sea en otras películas con este personaje. La pinta es lo de menos. Aquí tenemos a un Holmes que –muy bien encarnado por el actor Robert Downey Jr.– es más bien una figura esperpéntica o un “jipi” anticipado. ¿Antihéroe? Si ustedes me lo permiten, diría que –en manos de Guy Ritchie– Sherlock Holmes se transforma o se trasmuta en un antihéroe al servicio de la justicia. Ya no es el Sherlock Holmes de esa galería clásica donde podemos mencionar a investigadores como Auguste Dupin, el padre Brown, el inspector Maigret, el fino ladrón de guante blanco Arsenio Lupin, Hércules Poirot o Miss Marple.
La fotografía es muy interesante, ver un Londres antiguo con sus imperfecciones de ciudad el manejo de las tomas en los momentos de acción y deducción son muy con la firma de los productores la cámara en movimiento lento ayuda a poder creer en el por que de las cosas
Qiero Verla hahaha...
ResponderEliminarPero antes de leer, tu critica, la veo y luego vuelvo a pasar ok
Saludines